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Campeonato provincial escolar 2022

26 de Febrero de 2022. El Provencio

(Por Javier Cordero)

        Es sábado y toca madrugar, sacar las piezas de ajedrez de sus cajas y desempolvar los tableros. Poco importa no haber dormido demasiado. Nos dirigimos a El Provencio, localidad de la Mancha conquense que linda con la frontera sur de la provincia, que por tercer año ha albergado el campeonato provincial en edad escolar. Y en El Provencio recibieron a los pequeños ajedrecistas de la provincia como siempre lo hacen: con todo listo y mucho cuidado por los detalles, con una sala de juego amplia, cómoda y decorada con motivos ajedrecísticos, contando con todas las comodidades que los jugadores y la organización pudiesen desear.

        El campeonato, encuadrado dentro del programa “Somos Deporte” auspiciado por la Junta de Castilla la Mancha y por la Diputación provincial de Cuenca, se dividió en dos categorías: cadete e infantil-alevín, en ambas había premios para los tres primeros clasificados masculino y femenino así como 12 plazas para el Regional escolar. Un total de 54 ajedrecistas tomaron parte en la competición llegados desde distintas poblaciones: Cuenca, El Provencio, Tarancón, Uclés, Arcas, Valera de abajo o Palomera.

Categoría infantil - alevín

        Esta categoría tal vez tiene un rango de edades demasiado amplio, ya que pudimos ver a niños de 7 años jugando con otros de 14, con todo lo que ello supone. Como cada año, hay escenas que se repiten: los más pequeños, lejos de estar acobardados, estaban deseando comenzar y metían prisa a los árbitros cuando aún no se había podido ni confirmar a todos los participantes. Y tal vez eso es lo más bonito de toda esta experiencia, ver su ilusión, lo que disfrutan y, sobre todo, como se relacionan entre ellos sin ni siquiera conocerse, lo que te deja con la sensación de que todo el esfuerzo desarrollado ha merecido la pena.

        Pero al fin y al cabo esto es una competición, así que vayamos con los nombres propios del día. El rival a batir era el provenciano Carlos Solera... y eso que sólo tiene 10 años, pero sus triunfos en los últimos provinciales y su nivel de juego, que no para de crecer, hacen que esto sea un axioma indiscutible. Y Carlos consiguió, una vez más, cumplir con el pronóstico... aunque en esta ocasión los muchachos de la Escuela Municipal de Cuenca le pusieron en serios aprietos e hicieron que el camino tuviese más curvas que en otras ocasiones. 

        Durante las primeras partidas el torneo avanzó como es habitual, hasta que los más fuertes empezaron a encontrarse a partir de la ronda 3 (para los no iniciados, los emparejamientos se realizaron usando el sistema suizo, el cual siempre empareja a los jugadores que tienen los mismos puntos, de este modo cada participante compite con rivales de su nivel). Y en esa tercera ronda Carlos Solera se vio absolutamente sorprendido por Hugo de Arce, que le puso contra las cuerdas con un juego incisivo que derivó en una partida totalmente ganada para él, partida que no supo rematar finalizando la lucha en tablas... a Hugo aún le falta experiencia para resolver ciertas posiciones, en ajedrez lo que más cuesta no es obtener ventaja, sino rematar las partidas. De esta ronda salieron cinco líderes que habían logrado sumar una victoria en todas sus partidas: Gleb de Arce, Santiago Jiménez, Mario Cañas, Jesús Tapia y Manuel Haro, tres de ellos serían protagonistas en las rondas siguientes.

Mario Cañas (dcha) vs Carlos Solera, los dos jugadores más destacados del día

         Se superó el ecuador del torneo (cuarta ronda) con los conquenses Jesús Tapia y Mario Cañas en cabeza, ambos muy seguros y logrando un  pleno de victorias en las que dominaron con claridad a sus rivales. Ambos se enfrentaron en la quinta ronda, donde Mario logró imponerse cual apisonadora, manejando con soltura la apertura, atacando en el medio juego y rematando la lucha con brillantez, una gran partida que le dejaba como líder en solitario (con Carlos Solera a medio punto y un grupo de cinco jugadores a un punto de distancia). En la sexta ronda se jugó la partida decisiva del torneo: Mario Cañas se enfrenó a Carlos Solera con el título en juego. Ambos, de la misma edad, demostraron que no estaban ahí por casualidad: jugaron una partida muy correcta que derivó en un final muy igualado de 5 peones y una torre por bando, donde Mario tenía la iniciativa. Sin embargo, Mario quiso apretar demasiado y terminó viéndose superado... tal vez le falta experiencia para saber jugar los siempre complicados finales de torre. De este modo Carlos dejó el torneo encarrilado, lo que certificó venciendo en la última ronda, sumando así una nueva muesca en su revólver, esperemos que las muescas sigan apareciendo en los campeonatos regionales que tiene que afrontar en los próximo meses.

         Mientras se producían estas batallas en la mesa 1, no menos belicosas fueron las luchas de los que venían por detrás. Adrián Cebrián cuajó un gran torneo, logró 6 puntos de 7 y jugó alguna partida realmente meritoria, no acusando la inactividad en que se halla inmerso durante los dos últimos años, consiguiendo finalmente el segundo lugar. Jesús Tapia sólo tropezó ante Mario Cañas y pronto logró recuperar el paso con dos victorias que le permitieron finalizar en tercera posición, la última que daba plaza para el regional. En Jesús se nota el temple que da la edad, cumplirá 14 este año, comete pocos errores y juega de forma muy sólida, siendo muy difícil poder derrotarle. Gran torneo de Manuel Haro, logró varias victorias de mérito (ante Adrián Cebrián y Gleb de Arce) y finalizó en cuarta posición, su mejor resultado hasta el momento. Para Mario Cañas fue el quinto puesto, aunque por el juego que desplegó mereció uno de los puestos de honor, el cual no logró por pequeños detalles. Desde aquí le damos la enhorabuena por su progreso y le destacamos como jugador del día.

          Buen torneo también para Santiago Jiménez, Gleb de Arce, Gabriel Royuela y Jorge de la Mata, todos acabaron con 5 de 7 y sus partidas tuvieron un nivel alto, pueden estar satisfechos. Por supuesto, no se puede dejar de mencionar a tres jugadores: Jaime Raboso (6 años), Dylan Paladines (7 años) y Ginés González (7 años), que a pesar de su corta edad lograron 4 puntos de 7 y no por casualidad, desplegando un juego impropio de su edad. Me gustó en especial Jaime, que a pesar de tener un camino complicado (se cruzó con tres de los primeros clasificados), jugó partidas muy completas y dio mucha guerra en posiciones complicadas a nivel táctico en las que para nada se extravió. Si los tres deciden continuar moviendo piezas por un tablero de ajedrez, son el futuro a nivel provincial.

           Otros jugadores destacados fueron Iker Cano, 14º a pesar de que este sólo era su segundo torneo, y Jorge Bedis, que logró finalizar en 13er lugar mostrando un gran salto desde su última visita a El Provencio.

          La categoría femenina contó con muy pocas integrantes, sólo 6, lo que resulta cuanto menos llamativo, en mi opinión las niñas pierden una gran oportunidad de competir de tú a tú con los niños y practicar un deporte que aporta tantos beneficios. La dominadora fue Lucía Martínez, que logró finalizar en 12º lugar en la general con 4,5 puntos, mostrando un buen nivel en todas sus partidas. Realmente Lucía  no tuvo oposición, ya que las otras dos integrantes del podio, Elena Haro y Sara Toni, finalizaron a un punto y medio de distancia. Violeta Melero logró los mismos puntos que Elena y Sara, pero se quedó fuera del podio y del regional por el coeficiente de desempate.

 

Categoría cadete

          La categoría cadete estuvo presidida por la igualdad y por la incertidumbre de saber quién iría al regional. En esta ocasión Ana González no tuvo su día; descentrada desde la primera partida, no cuajó un buen torneo cayendo en errores que hace mucho que no cometía. Aun así fue la única que consiguió derrotar al ganador final y logró terminar en tercera posición. La situación la aprovechó Ernesto Calderón, que logró cuatro victorias ante sus cuatro rivales de la categoría masculina, lo que le sirvió para finalizar primero. Gran año de Ernesto, con dos victorias en los provinciales que ha jugado, las cuales se antojan justas por lo mostrado en el tablero. Los regionales serán una gran oportunidad para que su juego siga creciendo.

Ernesto Calderón

           De todos modos, existió mucha igualdad entre Alejandro Vallejo, Daniel Escamilla, Avelino Bustamante y Ernesto, cualquiera podía ganar a cualquiera, como demuestra el segundo puesto de Alejandro Vallejo, que bien podría haber sido primero si hubiese rematado la gran ventaja que tenía contra Ana, aunque su reloj llegó a cero y se tuvo que conformar con tablas. Alejandro se quedó fuera del podio en el sub 16, pero en esta ocasión jugó a gran nivel y estuvo cerca de ser primero. A Daniel y Avelino se les nota cierta inexperiencia en torneos, han empezado a competir este año y aún no consiguen jugar con la calma que requiere un torneo en edad cadete: pueden desarrollar buenas partidas, pero juegan de forma precipitada y un error de gran calibre siempre termina apareciendo por algún despiste.

Entrega de premios

        El día llegó a su fin con la ceremonia de entrega de premios, siempre bien dirigida por Juan Manuel Fernández, que contó con tres representantes del Ayuntamiento de El Provencio: el alcalde, Julián Barchín, la concejal de Cultura y Bienestar Social, Mª Amparo Girón y el concejal de Festejos, Miguel Ángel López, así como con el responsable e impulsor del ajedrez en El Provencio, Jesús Gálvez. Realmente la presencia de los miembros del ayuntamiento se dio durante todo el torneo, estuvieron presentes en la sala de juego atentos a que todo se desarrollase de forma adecuada, pendientes de cada detalle y de que no faltase nada a la organización. Desde estas líneas queremos mostrar nuestro agradecimiento por su dedicación, la cual facilita mucho las cosas a todos, tanto participantes como árbitros. Esperamos regresar a El Provencio en futuras ediciones, es como jugar en nuestra propia casa.

        Y así discurrió un día en el que quienes más disfrutaron fueron los niños, creo que todos regresaron a sus casas con una sonrisa dibujada en la cara tras haber disfrutado con el ajedrez y con sus compañeros. Realmente lo importante de la jornada no ha sido ganar o perder, ha sido disfrutar de una experiencia en la que los niños se abren al mundo, aprenden a convivir y a respetar al rival, relacionándose con personas que no conocen... Porque el ajedrez realmente es una escuela de vida.

Jugadores premiados y miembros de la organización

 

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