Campeonato provincial escolar 2023

11 de marzo de 2023. El Provencio

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(Por Javier Cordero)

        Por fin llegó el día más esperado por nuestros jóvenes ajedrecistas: el campeonato provincial escolar, el torneo por excelencia de cada temporada por su participación y por los buenos momentos que siempre brinda. Es un día que incluso trasciende al propio ajedrez, a la propia competición, significando una oportunidad para que los niños se relacionen y compartan su afición por este deporte con otros ajedrecistas de localidades distintas a la suya.

        Era la cuarta vez que nos desplazábamos hasta El Provencio, localidad de La Mancha conquense situada en el suroeste de la provincia, donde volvimos a encontrar una organización esmerada y pendiente de cada detalle, ofreciendo su hospitalidad, que nace del mismo pueblo, a todos los participantes y a la organización. No puedo dejar de mencionar a Amparo Girón, concejala de bienestar social, educación y cultura, que ya estaba presente en la sala de juego antes de que llegasen los jugadores y que se ocupó de cada aspecto para que a nadie le faltase nada durante toda la competición. Todo se tradujo en unas condiciones ideales para que los niños disfrutasen del ajedrez... y quieran repetir el año que viene. Desde estas líneas les quiero expresar mi más sincero agradecimiento.

        Si bien el ambiente puede resultar lo más llamativo, lo más importante para los participantes es la competición, así que reconduzcamos esta crónica en esa dirección. En juego había seis plazas para el campeonato escolar de Castilla la Mancha, tres en la categoría masculina y tres en la femenina, poco botín para los 78 participantes que comenzaron el campeonato. Sin embargo, cada niño juega su torneo, el ajedrez sirve para poner los pies en el suelo a todo el que lo practica y cada uno de ellos buscó sus propios objetivos.

        El favorito volvía a ser el campeón de la edición anterior, el provenciano Carlos Solera, y probablemente lo seguirá siendo durante los próximos años ya que su nivel de juego crece sin parar y de momento su techo se encuentra lejos. Carlos decidió rendir honores a su favoritismo y se fue imponiendo ronda a ronda, con un ajedrez fluido y dominante, rematado con frecuencia con alguna interesante combinación, logrando un pleno de siete victorias que le situaron de forma justa en lo más alto de la clasificación. Veamos el final de una de sus partidas, muy importante para el desarrollo del torneo ya que ambos jugadores iban empatados en cabeza con 5 puntos, en el que tiende una trampa en la que su rival cae de forma irremisible:

Carlos Solera Cabrera (El Provencio)

        Tras Carlos Solera venía todo un regimiento de jugadores dispuestos a pelear por los dos puestos que daban plaza para el regional. El pronóstico era incierto y parecía claro que todo estaría abierto hasta el último movimiento, como así ocurrió. Una vez superado el ecuador de la competición la situación empezó a definirse, con varios jugadores empatados en cabeza con pleno de victorias: Jaime Raboso, Carlos Solera, Manuel Haro, Íker Cano y Simón Cañas. Viendo las partidas, parecía que el más fuerte era Íker Cano, pero en la quinta ronda echó todo su trabajo por tierra al cometer un error en una posición en la que contaba con mucha ventaja (no se percató de una clavada que le costó una torre). La derrota le afectó y también perdió con Jaime Raboso, quedando alejado de los puestos de honor.

        Jaime Raboso, de sólo 8 años de edad, se mantuvo en las primeras mesas durante todo el torneo. Pero esto no es lo reseñable, lo que sorprende en él es su capacidad para concentrarse y comprender la posición, aspectos que se ganan con el paso de los años. Como es lógico, aún le faltan ciertos automatismos que da la experiencia, cuantas más partidas juegue un niño más patrones de posiciones podrá reconocer su cerebro, lo que le permitirá desenvolverse en todo tipo de situaciones con mayor facilidad, de ahí la importancia de jugar mucho a estas edades. Jaime tuvo el segundo puesto al alcance de la mano, sobre todo cuando en la última ronda logró una posición ganadora, pero un ataque a la descubierta que le pasó desapercibido cambió totalmente la partida, terminando por abandonar, lo que le trasladó a la séptima posición final, muy meritoria, aunque mereció un premio mayor.

Jaime Raboso Alonso (Tarancón)

        El segundo puesto recayó finalmente en el conquense Simón Cañas, un jugador que es un ejemplo de cómo encarar una competición: mostrando un entusiasmo que fue creciendo con cada ronda, siempre jugó sin miedo a perder y dispuesto a dar el máximo sin importar el rival, aspectos más positivos de lo que pueda parecer, ya que esa tenacidad le permitió superar una posición muy difícil ante Jaime Raboso en la última ronda, logrando una trascendental victoria que le sirvió para clasificarse para el regional. No hay que olvidar que Simón lleva en el ajedrez (asistiendo a clases) sólo un año y medio.

        El sistema suizo suele dar toda una gama de sabores y sinsabores en la última ronda. Eso lo comprobó Jorge de la Mata, que tras realizar un buen torneo, con una gran victoria ante Jaime Raboso incluida, perdió ante Manuel Haro en la última partida en una posición que estaba muy igualada y en la que se le escapó un mate en uno, lo que le hizo precipitarse en la clasificación hasta el decimotercer lugar. En el polo opuesto se situó Manuel Haro, que en 2022 se quedó a las puertas de entrar en el podio, pero que este año parecía decidido a que la situación no se volviese a repetir: manteniéndose siempre en las primeras mesas, sólo cedió ante Carlos Solera, superando unas rondas finales muy complicadas en las que supo jugar con la solidez suficiente para finalizar en un gran tercer puesto.

Última ronda, todo en juego: Isidoro González vs Carlos Solera y Simón Cañas vs Jaime Raboso

        La gran sorpresa del torneo fue el conquense Jaime García, que logró finalizar en cuarta posición a pesar de su corta experiencia en torneos. Jaime sólo perdió ante Carlos Solera en la segunda ronda, superando este traspié con tres victorias consecutivas que le llevaron a la última ronda en una situación prometedora. En esta última partida superó a Gabriel Royuela, que estaba haciendo un gran torneo, dejando a su rival sin podio. Probablemente Jaime era el jugador más feliz al finalizar la competición y no era para menos. Santiago Mirasol (Las Pedroñeras) también logró un gran resultado al conseguir 5,5 puntos y finalizar en quinta posición, si bien es cierto que no estuvo en las primeras mesas hasta la ronda final, donde demostró su buen nivel al derrotar a Maya Parra con claridad.

        Uno de los aspectos más positivos del campeonato fue el aumento de la participación en la categoría femenina. Además, las tres primeras clasificadas finalizaron empatadas con 4,5 puntos entre el 16º y 19º lugar, lo que representa una gran mejoría respecto a ediciones anteriores. Ahora debe llegar el trabajo de sus monitores para motivarlas y hacerles ver que no se deben de conformar con los primeros puestos de la categoría femenina, sino que deben pelear por los primeros puestos de la clasificación global. La primera clasificada fue Maya Parra, de Motilla del Palancar, que cuajó una gran actuación sólo frenada en la última ronda, pero que le sirvió para conseguir su primer título provincial. La conquense Sara García logró superar los nervios propios de enfrentarse a su primer torneo y se embarcó en una gran remontada tras un comienzo titubeante, consiguiendo una última victoria de mérito ante Luis Pradera, un jugador experimentado en torneos. El tercer puesto fue para Elena Haro, que también se recuperó de un flojo comienzo (dos derrotas en las dos primeras rondas), para llegar desde las profundidades hasta la zona noble... lo que en ajedrez se conoce como la táctica del "submarino". Para Sara Toni fue el cuarto lugar, a sólo medio punto de la vencedora final.

Maya Parra (Motilla del Palancar)

Ver Clasificación infantil-alevín

Galería de jugadores premiados

        Jesús Tapia ha conseguido prolongar su racha de triunfos en este provincial escolar, aunque su juego no fue tan consistente como en el provincial sub 16. Su triunfo fue claro si se mira su actuación de forma global, pero Jesús cometió errores en varias de sus partidas, algo poco común en él, de hecho llegó a estar con desventaja en sus dos partidas contra Lucía Martínez, en la primera de ellas en un final donde se firmaron tablas cuando Lucía tenía suficiente ventaja para ir en busca de la victoria. Pero en ajedrez siempre suele ganar el jugador que comete el penúltimo error (frase de Tartakower) y Jesús, a pesar de algún error puntual, es un jugador difícil de derrotar, por lo que siempre se las ingenió para remontar las posiciones en las que estuvo inferior, finalizando imbatido. Veamos a continuación una de sus victorias:

Daniel Escamilla vs Jesús Tapia

        Me da la impresión de que el hecho de que sólo hubiese tres participantes en la categoría masculina y una en la femenina, por lo que todos irían al regional, influyó de forma negativa en las partidas, donde hubo algunos errores impropios de una categoría en la que se supone que el juego debe ser más maduro. Para Daniel Escamilla fue el segundo puesto, aunque en ningún momento llegó a inquietar a Jesús ya que tuvo una primera vuelta muy floja en la que dejó escapar dos puntos por errores importantes. En la segunda vuelta se rehízo y pudo superar a Santiago Jiménez. Santiago Jiménez estuvo algo irregular, alternando buenas partidas con errores que echaron por tierra buenas posiciones; su tercer puesto parece justo vistas las partidas.

Clasificación final

Galería de jugadores premiados

       Como siempre, la competición llegó a su fin con la entrega de premios, la cual fue dirigida por el árbitro Juan Manuel Fernández y contó con dos representantes del Ayuntamiento de El Provencio: el alcalde, Julián Barchín, y la concejal de Cultura y Bienestar Social, Mª Amparo Girón, así como con los responsables del ajedrez en El Provencio, Jesús Gálvez y Mario Escribano. Durante el discurso se agradeció a los colaboradores de El Provencio todo el esfuerzo realizado, el cual no fue en vano: todo salió a la perfección.

        Voy a cerrar esta crónica con las palabras que supusieron el colofón a la crónica del año anterior, las sensaciones son las mismas y merece la pena repetirlas: "Así discurrió un día en el que quienes más disfrutaron fueron los niños, creo que todos regresaron a sus casas con una sonrisa dibujada en la cara tras haber disfrutado con el ajedrez y con sus compañeros. Realmente lo importante de la jornada no ha sido ganar o perder, ha sido disfrutar de una experiencia en la que los niños se abren al mundo, aprenden a convivir y a respetar al rival, relacionándose con personas que no conocen... Porque el ajedrez realmente es una escuela de vida".

Jugadores premiados y miembros de la organización